Tras oficializarse la marcha del Club del jugador David Cuerva, el ya ex fabril nos hace llegar esta carta de cara a todos los socios/as y aficionados/as.
Gracias por tu profesionalidad.
Hola gualdinegros/as:
Escribo esta carta sin saber cómo, ya que son demasiados los sentimientos por expresar que es difícil empezar. Quería comunicar que mi contrato con el Barakaldo ha finalizado.
Hace un mes y medio que se me presentó una oportunidad para poder jugar en el extranjero. Tras valorarlo, hablarlo con mi pareja, familia y amigos decidí arriesgar y embarcarme en esta aventura.
Son momentos difíciles debido a que dejo atrás algo más que un equipo de fútbol. Dejo atrás un club que me demostró desde el primer día que con humildad, gracias al cuidado de los detalles, su cercanía y el cariño hacia sus jugadores, es un club grande.
Dejo atrás un cuerpo técnico con valores, que me dio la posibilidad y la confianza de disfrutar de muchos buenos momentos en el verde.
Dejo atrás un vestuario, una familia, que me ha vuelto a recordar lo más valioso de este deporte: unión, compañerismo, solidaridad… Y, por último, y no por ello menos importante, dejo atrás a una gran afición que siempre ha demostrado estar con nosotros en los buenos momentos y en los no tan buenos. Echaré de menos el rugir de Lasesarre.
Me siento afortunado y sobretodo tremendamente agradecido por haber podido formar parte de la familia Barakaldesa y de vestir siempre con orgullo la camiseta de un histórico. Contento también porque el club en parte haya salido beneficiado económicamente tras la operación.
Me marcho de Euskadi enamorado de sus paisajes y de su gente.
La vida gira. Por ello, solo espero que nuestros caminos algún día se vuelvan a cruzar.
Gracias a todos, de corazón!
Eskerrik asko eta Aúpa Baraka!
